La exposición social. DALE PLAY!

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«Fuertes razones hacen fuertes tus acciones»
Empezar desde el principio

Te pasa que a veces queres hacer algo y por vergüenza no lo haces? Vergüenza a qué? A quedar en rídiculo? A lo que opina el resto? Al que dirán?

Animarse a hacer las cosas que uno quiere hacer, no siempre es fácil.
Entre los pensamientos limitantes y la falta de coraje, es más sencillo, quedarse en la zona de confort.
Si bien me considero una persona resilente, paradójicamente no me llevo bien con los cambios.
A ver…vamos a desentramar esta falta de coherencia:

– Como habrás notado, me gusta tener el control sobre las cosas. Entender la situación, tener la información necesaria, conocer mi ruta y organizarla me da tranquilidad.
– No obstante, cuando se me presenta un escenario imprevisto en mi agenda, me llena de adrenalina y entusiasmo lo nuevo.

– Me gusta disfrutar de que las cosas funcionen, de los procesos, del fluir, de cierta rutina en algunas cosas. Peroooo también todo tan ordenado y rutinario me termina resultando aburrido. Lo desafiante se presenta cuándo están esos cambios que uno quiere hacer…pero no se anima… porque cuándo el cambio viene de sopetón (por ejemplo, te hechan del trabajo) no tenes mucho que hacer al respecto, más que abrazar la situación y darle para adelante. En este posteo quiero centrarme en los cambios que dependen 100% de nosotros.


A veces quiero cambiar. A veces me llaman la atención algunas cosas, pero simplemente no me animo a hacerlas.
No me animo por miedo a fracasar, a no hacerlas bien, al rídiculo, al qué dirán.
A veces necesito ese aliento, esa persona que te desafía, que te apoya a hacerlo… y es sólo eso, animarte para dar el salto… para dar el primer paso.
Dar el primer paso de mucho más que vienen, pero tenes que tener paciencia, porque como todo, se contruye, se aprende; te equivocas, haces el rídiculo, mejoras… pero la única manera de estar satisfecha con las cosas que haces es practicando, y para practicar tenes que empezar y ser constante… es muy díficil, sobre todo para personalidades como la mia que busca constantemente la perfección, que es muy autocrítica y que ante el primer error genera frustración y queres mandar todo a la m¨¨¨¨. Lo he hecho, más de una vez!!! Pero al ratito vuelvo, barajo y doy de vuelta. Qué hay que mejorar? Cómo lo puedo mejorar? Paciencia, de a poco, capaz no se puede hacer todo junto.


EL PASADO

Primeros pasos: Cuando era chica, soñaba con ser actriz, no cualquier actriz, soñaba con ser parte del team Chiquititas. Me sabía todas las canciones, todas las coreografías y hasta tenía el vestuario y por supuesto todaaaaaa la colección de revistas.
A los 13 años (si la memoria no me falla) Mi mamá me llevó a clases de teatro. Ensayamos la Obra de Williams Shakespeare «Medida por Medida», mi personaje era un mensajero de Dios, que leía la sentencia de dos amantes. En los ensayos ibamos bien, pero el día del estreno de la obra, me acobardé cuando tenía que subir al escenario, me daba verguenza que todos me estuvieran mirando, pero no podía tirarme para atrás. Son esos segundos que estas detrás del telón y estas congelada… hasta que das ese primer paso.
Pueden pasar dos cosas… que todo salga bien o que hagas el rídiculo, pero no lo vas a saber si no lo intentas!. En ese momento hay 2 tipos de personas, las que te presionan para que salgas porque lo más importante es la obra o las que te dan palabras de tranquilidad y apoyo personal. El director era de las primeras… la obra por sobre todo lo demás.
La función salió bien, cómo lo habíamos ensayado.
Mi personaje era tartamudo y sumiso, por eso tenía que andar con la cabeza a gachas y simular que leía un mensaje (la sentencia). Para la audiencia lo que se interpretó fue «te olvidaste la letra y leiste»…así que tras esos comentarios, en la segunda función, lo hice sin el papelito. El director se enojó, porque no era lo «acordado».

La Adolescencia: Entre los 15-17 años, hice desfiles en discotecas y promociones en la via publica. Me costaba arrancar la charla, pero después de un ratito me sentía muy cómoda. Siempre se me dio bien las relaciones públicas y el sociabilizar, aunque me cuesta dar inicio a la charla. No me llevo bien con un público observandome, no me hace sentir comoda ser el foco de atención.

Colegio: En el colegio y en la facultad siempre me costaron muchisimo los exámenes orales.
Sentirme ahí vulnerable, observada, expuesta; frente a toda la clase.
Yo necesito mi momento de pensar las respuestas, de analizar la situación, de pensar una solución. y la presión de estar ahí…no me gustaba. Me acuerdo que estudiaba bien de memoria para repetir como un loro, tenía palabras claves que eran disparadoras, pero inclusive hasta el día de hoy, en ocasiones tengo prepados discursos en mi mente y cuando llega el momento me sale cualquier cosa, no me salen las palabras, no me acuerdo qué tengo que decir.

Una meta personal pendiente es hacer algun curso de oratoria.

Con el pasar de los años, me dedique a lo que es organzación, gestión, coordinación pero desde el backstage. Me dan vergüenza las cámaras, me pongo toda colorada cuando me agradecen en público.


Con la creación de Contame de Mi, los albums para recidén nacidos, y esta cuestión de «humanizar» la cuenta tuve que aprender a soltarme un poco.
Hice algunos talleres y cursos, que me ayudaron a empezar a darme el espacio aunque sea en las historias.
Cuando cuento que soy vergonzosa o no me gustaban los bebés… la gente me mira desorientada. y es verdad!!!
A la versión pre mamá de Natu no le gustaba el mundo maternal.
A la versión pre Contame de Mi de Natu, no le gustaba exponerse.
No es que cambié, evoluconé. Me animé.


Primero dí un pequeño paso, y pensé «las historias duran 24 horas, qué puede pasar?» eso me dio más libertad.
Debo aclarar, que aún, las filmo cuando estoy sola en casa, sin que nadie me mire, y sigue dandome vergüenza cuando alguien hace algún comentario sobre las historias que subí, pero ya está!
Me animé, lo hice!, y ese es el punto.
Hoy tomé un poco más de confianza en ese roll.


EL PRESENTE

El Blog: Hace un tiempito le di vida a este espacio, también como parte del proceso de empezar a soltarme, dejar la vergüenza de lado, escribir sin tanto tabu, yo nose si alguien lo lee o no, pero vuelvo a insistir es una cuestion personal que me ayuda.


Hoy, charlando con una colega emprendedora, decidí dar un paso más en este recorrido por intentar dejar el miedo a la exposición. Decidí grabar un video que voy a subir en mis redes sociales y que va a quedar ahí inmortalizado. No va a desaparecer en 24 hs.
Lo filmé varias veces, para tratar de mejorar la fluidez, el speech, las palabras…pero no lo ensayé, lo deje lo más aunténtico y genuino posible. Inclusive se escucha a Oliver. Esta parte del ejercicio es soltar, es animarse, es hacer algo diferente en post de ese pensamiento limitante.

Hoy me desafíe a lo misma y dije sabes qué? Me voy a animar voy a hacer un vídeo para presentarme…
Así que acá está.
Te lo comparto.
Acá frente a la cámara: nerviosa, tartamudeando, moviendo las manos como loca!…
Acá estoy animandome un poco más a dar otro paso. A mostrarme.

Empezar desde el principio

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